jueves, 11 de septiembre de 2014

Coincidencias emparejadas...o así

Coincidencias emparejadas…o así

Santos Rejas Rodríguez

El tema de hoy de mi camarero de terraza es una rama de árbol desgajada. Por Vallecas, me ha parecido oírle.  Una rama de árbol ha caído sobre un transeúnte, aplastándolo. Debía ser un tronco de considerable tamaño y peso.
En trance de regresar a mi tarea novelística el camarero pasó de la información a la relación, a la coincidencia de sucesos, poniendo ejemplos y comenzando por unir la caída de la rama de Vallecas con la que recientemente se desprendió de otro árbol en el Parque del Retiro matando, también, a otro hombre que casualmente estaba debajo. Después, con la precisión sorprendente, aunque vete a saber si no es doctor cuántico empleado ‘en lo que salga’, relató accidentes consecutivos de aviones, de camiones volcados y de transeúntes atropellados en pasos de peatones…concluyendo que, ocurrido un suceso, de inmediato le sigue otro de semejantes características, como si hubiera una ley de emparejamiento.
 Quien parece ser el jefe de terraza, con modos y ademanes inequívocos, cortó la disertación al relator bajo excusa de que tenía varias mesas desatendidas. (¿Envidia pura?)


El hueco de silencio fue aprovechado por una interrogante que se me coló de vete a saber, y que más o menos, expresado en palabras, preguntaba ¿será cierto que a un suceso le sigue otro de características idénticas? ¿A la decisión de Ana Botella de no presentarse a las elecciones le seguirá otra semejante? ¿Decidirá Rajoy no presentarse a las generales? ¿De modo irrevocable y para siempre?
Ya le diré a mi camarero si sus observaciones tienen una base científica, aunque claro, en la política las variables intervinientes pueden trastocar hasta la teoría de la relatividad…sniff

(Tras escribir lo que antecede, y enviado al periódico, leo que la actriz Molly Glinn muere tras sufrir un golpe en la cabeza por una rama desprendida de un árbol mientras paseaba con su marido en Chicago…tenía 46 años. D.e.P.)

1 comentario:

Águila Roja dijo...

Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones